Princes Street Garden

Bajo el Castillo de Edimburgo, en el centro de la ciudad, se encuentran los jardines de Princes Street. Es el parque más famoso de Edinburgo y el preferido por locales y viajeros.

Tiene más de 150 mil metros cuadrados de superficie, divididos en dos por la colina artificial The Mound, donde está la Galería Nacional de Escocia.

Un poco de historia

Este parque público fue creado en dos etapas, en 1770 y 1820, a medida que iba avanzando la urbanización de la Ciudad Nueva, que comenzó en 1770. El parque funciona como línea divisoria entre la Ciudad Vieja y la Ciudad Nueva.

Los jardines se crearon en el lugar de un antiguo lago que fue drenado, el Nor Loch. En esa época estaba muy contaminado, ya que se usaba como drenaje de la Ciudad Vieja. Además, su ubicación impedía la expansión de la ciudad.

Monumentos del parque

En los jardines del este, el más importante es el Monumento a Walter Scott, de 1844, una torre gótica construida para homenajear al escritor más famoso de Escocia, autor de célebres novelas históricas.

David Livingstone, médico y misionero en África, se convirtió en héroe británico por su labor humanitaria. La estatua en su honor lo muestra como predicador.

En los jardines del oeste se alzan, entre otras, las estatuas de Allan Ramsay, escritor y editor de los siglos XVII al XVIII, y Thomas Gutrie, filántropo y predicador del siglo XIX.

Dos memoriales homenajean a los Royal Scots y los Royal Scots Grey, regimientos de infantería y caballería que fueron parte de la British Army entre los siglos XVII y XXI.

Junto a la explanada del castillo hay una auténtica runa del siglo XI, de origen vikingo, una de las tres piedras rúnicas suecas que existen en Gran Bretaña.