Cerdeña
Alghero
De calles estrechas y empedradas, esta ciudad medieval es una de las más atractivas de Cerdeña.
Ubicada en el noroeste de la isla, los orígenes de Alghero se remontan al siglo X, cuando fue ocupada por los genoveses. Sin embargo, a mediados del siglo XII tropas catalanas invadieron la ciudad, donde permanecieron por más de 300 años. De allí que su casco antiguo sea uno de los más pintorescos de la zona, con monumentos y palacios de estilo gótico catalán. Además, esta influencia catalana aún está presente en el idioma y se mantiene vivo entre algunos de sus habitantes hablar en catalán arcaico.
Alghero se encuentra rodeada por antiguas murallas y siete torres fortificadas. Entre sus calles estrechas abundan tiendas y pequeñas plazas, destacando edificios históricos como el Palacio d´Albis en la Plaza Cívica, la Catedral de Santa María y la Iglesia de San Francisco de estilo gótico.
Además resulta de interés la Grotta de Neptuno, una serie de cuevas decoradas a las que se puede acceder en barco saliendo desde el puerto de Alghero, o bajando los 656 escalones de la Escalera del Cabirol, ubicada en Capo Caccia.
Si bien se trata de una ciudad turística, con numerosos restaurantes, tiendas y hoteles, Alghero aún conserva su ritmo tranquilo en medio de vides y olivos. Cuenta con maravillosos espacios naturales y uno de los mayores atractivos es disfrutar del atardecer en el paseo marítimo, donde también se pueden tomar cruceros turísticos. Aquí resulta de interés el Bastión de la Maddalena, la fortaleza española más importante de la ciudad donde el 14 de agosto 1855 desembarcó el militar y político italiano, Giuseppe Garibaldi, protagonista en la lucha por la unificación de su país.
Las playas de arenas finas y aguas cristalinas también son parte de esta inigualable ciudad, una de las más elegidas por el turismo en Cerdeña.