Excursión a las Cataratas del Rin y Castillo de Laufen
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Si todavía no conoces Suiza, ¡añádelo en tu lista de viajes pendientes! Si estás pensando en viajar a este país montañoso de la Europa Central y conocer la fantástica ciudad de Zúrich, en este post de nuestra guía de encontrarás 10 razones que te convencerán.
Este país destaca por su gastronomía, sus paisajes de estampa, sus actividades al aire libre, su cultura, arquitectura y, como no, su chocolate. El chocolate suizo es una maravilla, y Zúrich es el mejor lugar para probarlo y comprarlo. Pero más allá de esto, hay muchos lugares, planes e ideas que no deben faltar en tu visita a esta ciudad ultramoderna, con sus bares que se despliegan a las orillas del río y sus distritos comerciales.
¡Bienvenido a la ciudad europea con la tradición alpina más sorprendente y maravillosa!
Zúrich es una ciudad con rincones mágicos, y Altstadt, su casco antiguo, es el mejor escenario para descubrirlos. El área que abarca esta zona se encuentra delimitada por las murallas medievales y se divide en cuatro barrios, dos de los cuales se despliegan a la orilla del río Limmat.
En esta zona es donde se concentran la gran mayoría de atractivos turísticos de la ciudad. En parte, todo su legado se encuentra bien conservado porque no ha habido ningún conflicto bélico que se desarrolle en sus calles.
Te recomendamos que pasees por la calle de Niederdorf, donde se reúnen negocios locales, restaurantes de vanguardia, tiendas de souvenirs y otras tantas que te llamarán tu atención, en muchos casos por el atractivo de sus productos y, en otros, por su desorbitado precio. Recuerda que en Zúrich todo es carísimo, pero vaya, que también encontrarás piezas de chocolate deliciosas a muy buen precio para llevarte de recuerdo para ti y para toda tu familia.
La Catedral de Zúrich es uno de los templos religiosos más importantes de la ciudad y es de estilo románico, aunque muchos de sus elementos, como por ejemplo sus campanarios, se añadieron después al estilo neogótico.
Esta catedral se construyó sobre un templo carolingio y, según se afirma, fue mandada a construir por Carlomagno. Sabemos con seguridad que se construyó en el siglo XII y que fue importante durante la Reforma Protestante, puesto que aquí se inició el movimiento en el año 1520 por parte de Huldrych Zwingli.
Su interior destaca por las vidrieras de Augusto Giacometti, añadidas en 1933, el Museo de la Reforma, que se encuentra en el claustro o su maravillosa cripta románica. No obstante, lo más magnífico de este lugar son las vistas que se obtienen subiendo los escalones que llevan a lo más alto de la torre Karlsturm.
En Zúrich hay un lugar mágico que roba el corazón de todos sus visitantes: el Lago. Con un área de 90 km2 y más de 40 km de largo, es un excelente lugar para realizar actividades al aire libre, en contacto con la naturaleza, sin tener que renunciar a las comodidades de la metrópolis.
El Lago de Zúrich es también un lugar fantástico para realizar deportes de aventura, darse un baño refrescante, caminar por senderos rodeados de naturaleza o tomar un barco e ir de un lado al otro para conocer encantadores rincones de la ciudad. Utiliza una de las líneas de transporte regular que salen desde Bürkiplatz.
La Ópera de Zúrich es una de las más prestigiosas de todo el continente europeo. Hasta el año 1890, el Arkientheater fue el auditorio de la ciudad por excelencia, el cual alcanzó una gran fama durante el período en el que Richard Wagner estaba de exilio. No obstante, tal y como ha pasado con muchos teatros a lo largo de la historia, un incendio lo redujo a cenizas, de ahí que se construyera uno nuevo en 1981 al estilo neobarroco.
En el año 1941 se rebautizó con el nombre Opernhaus y se construyeron alrededor otros edificios dedicados a las representaciones teatrales. Te recomendamos que vayas a visitarlo porque el interior es realmente una maravilla. Puedes hacerlo mediante un tour o, por supuesto, asistiendo a una obra, que es la opción que más te recomendamos si vas con suficiente tiempo.
No muy lejos de la Catedral de Zúrich se encuentra otra de las iglesias protestantes de la ciudad, conocida como la Farmünster, un templo que fue creado como parte de la antigua abadía benedictina del 853, un lugar que siempre tuvo una gran importancia en la ciudad como centro de gobierno, hasta que finalmente se disolvió en 1524.
El órgano de esta iglesia es el más grande de Zúrich y tiene, nada más y nada menos, que 5793 tubos que emiten un sonido espectacular.
Hoy en día, la iglesia que podemos ver al lado opuesto del río en el que se ubica la Grossmünster, atrae a muchos visitantes, especialmente por los cinco ventanales de Marc Chagall, creados en 1960, así como su rosetón de la nave transversal.
¿Buscas una calle elegante y con las tiendas con las marcas más prestigiosas del mundo? Entonces ve a Bahnhofstrasse, o la Calle de la Estación, y déjate seducir por los perfectamente decorados escaparates de los negocios suizos, de sus últimas tendencias en moda, de las confiterías o restaurantes y bares de vanguardia.
La calle transcurre desde el lago de Zúrich hasta la estación de tren. Recórrela entera, en su mayor parte es peatonal, y mide unos 1,5 km aproximadamente. Encontrarás tiendas como Dior, Armani, Chanel o Cartier.
No muy lejos de Lindenhof, junto a las orillas del río Limmat, se encuentra un grupo de casas llamado Schipfe que es una maravilla.
Antiguamente era el lugar de atraque de barcos y su punto de partida, de ahí que a partir del siglo XVI se construyeran industrias de todo tipo, como seda o astilleros.
Lo más interesante de Schipfe es que en la actualidad conserva la esencia de barrio de artesanos, con su casco antiguo lleno de comercios de artesanías donde podrás encontrar objetos y souvenirs muy interesantes para regalar a la familia, pareja o amigos. Asimismo, las bases de algunas de las casas de madera, datan del siglo XII y son auténticas reliquias.
Te aconsejamos que pasees por sus estrechas calles y te dejes envolver por la magia de un entorno irrepetible que te transportará directamente a otra época de la historia.
Si eres un amante del arte, entonces tienes que ir al Museo Nacional, un edificio cuya arquitectura ya podría considerarse una joya. También conocido como Landesmuseum, acoge una interesante colección de historia relacionada con el país a través de un discurso museográfico muy dinámico y ameno.
Dentro de la exposición permanente encontrarás objetos y patrimonio histórico que te hablan de temas de importancia social, asimismo, sus exhibiciones temporales, suelen estar relacionadas con temas históricos o culturales y se completan con interesantes talleres y conferencias.
Te recomendamos que lo visites con una guía electrónica y disfrutes del recorrido escuchando en español aspectos interesantes y muy relevantes sobre la historia de la ciudad, Suiza y toda Europa, desde la prehistoria hasta la actualidad.
Si te apetece escaparte de Zúrich y tienes suficiente tiempo para adentrarte en una aventura por la campiña suiza, entonces tienes que ir a conocer el Monte Titlis y llegar hasta su cima para obtener las vistas más hermosas a los glaciares.
Con este tour que parte desde la ciudad y dura unas 9 horas aproximadamente, te adentrarás en lugares magníficos de Suiza más allá del Monte Titlis, como por ejemplo la Cueva de Hielo y su túnel de 150 metros de longitud; el puente colgante más alto de Europa, conocido como Cliff Walk; o una visita a Lucerna, una localidad preciosa en la que podrás disfrutar visitando algunas de sus atracciones turísticas más interesantes.
Suiza es un conjunto maravilloso de paisajes que quitan el aliento, y los Alpes Suizos son la joya de la corona. Grindelwald es uno de esos lugares que tienes que visitar: una hermosa aldea que constituye uno de los destinos vacacionales más visitados del país.
Es también un fantástico destino para realizar actividades como subir en teleférico a miradores fantásticos en plena naturaleza o, sencillamente, hacer paseos en bicicleta para explorar las zonas más verdes de los Alpes durante el verano.
Por otro lado, Interlaken destaca por ser el escenario de encantadores paisajes urbanos con tiendas exclusivas, casas alpinas y árboles centenarios. Es también un lugar ideal para dar un paseo por el lago Brienz, un escenario de lo más romántico.
Para vivir esta experiencia de una forma cómoda y tranquila, te recomendamos que le eches un vistazo a este tour con traslados en autocar que parte desde Zúrich y que te lleva, con un guía multilingüe, a ambos lugares.
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