Venezuela

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Salud en Venezuela

El certificado de vacunación contra fiebre amarilla no es obligatorio, salvo que usted esté viajando desde alguno de los países africanos o americanos especificados por el gobierno venezolano (ver lista). No obstante, el gobierno venezolano y el español recomiendan, de acuerdo al reglamento sanitario internacional, OPS-OMS, vacunarse contra esa enfermedad por lo menos 10 días antes del viaje.

El nivel Salud en Venezuela tiene unos niveles a aceptables pero con todo conviene tener en cuenta que en ciertas zonas rurales hay riesgo de paludismo y dengue. Para éste último caso, conviene intensificar la protección contra picaduras de insectos.

El agua es potable, aunque es aconsejable beber agua mineral embotellada.

Se debe evitar consumir alimentos que se venden en puestos ambulantes, a menos que luzcan absolutamente frescos y hayan sido elaborados con normas de higiene aceptables.

El sistema de salud en Venezuela cuenta con hospitales públicos de atención totalmente gratuita, a los que se agregan los sanatorios privados. La atención en los hospitales públicos puede ser desigual, depende mucho de la zona en que se encuentren. Se puede acudir sin problemas en caso de emergencias. En los centros privados la atención es excelente pero los costos altísimos, se paga por adelantado sobre una estimación de costos,  en efectivo o con tarjeta de crédito, por lo que es aconsejable contar con seguro médico para viajeros.

Venezuela cuenta con una amplia red de farmacias con buenos suministros. Puede acceder al directorio de farmacias de todo el país a través de las Páginas Amarillas de Venezuela. Siempre encontrará farmacias de turno cerca del lugar donde se encuentre.

Si viaja a regiones rurales evite tomar agua de fuentes naturales, si no está seguro de su procedencia, puede haber riesgo de contaminación.

Si viaja a la zona de los Andes, tenga en cuenta que a partir de los 3.600 m. de altura es probable que su organismo se vea afectado. Los síntomas comunes son náuseas, mareos, dolores de cabeza y dolores en el pecho. Por lo general el cuerpo se acostumbra a las nuevas condiciones en pocos días, pero si los síntomas persisten, es aconsejable visitar a un médico. No olvide el abrigo apropiado para las grandes alturas y las noches de montaña, que suelen ser muy frías.

Recuerde que en la zona costera y zonas bajas en general, la temperatura puede llegar a ser elevada. Es imprescindible usar protector solar, gafas para el sol y cubrirse la cabeza.

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