Acrópolis de Atenas

La Acrópolis ocupa el primer lugar del Top 10 de imprescindibles de Atenas. Construcciones antiguas y mitológicas cobran protagonismo en esta mágica “ciudad alta” que comenzó a edificarse en el siglo V a.C., cuando se encontraba Pericles en el poder.

Historia y propósito

Bajo la dirección de Fidias, el propósito de su construcción fue el mismo que el de la mayoría de este tipo de complejos monumentales: servir tanto de lugar defensivo como así también de espacio de culto.

Situada a 156 metros sobre el nivel del mar, en esta meseta se erigen los monumentos más famosos de la Grecia clásica: la entrada se realiza por la puerta de los Propileos, encontrándose a la derecha el Templo de Atenea Niké. Siguiendo en la misma dirección se erige el Partenón, llegando por la izquierda hasta el Templo Erecteion y por la ladera sur hasta el Teatro de Dionisos. Por último, a unos 200 metros se emplaza el Odeón de Herodes Ático.

Dadas estas características que la conforman como el símbolo de la civilización clásica, la Acrópolis fue declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad en 1987.

Períodos de la Acrópolis

Antes de llegar a esta disposición actual existieron distintos períodos por los que atravesó la construcción monumental. De su etapa micénica se encontraron algunos vestigios de un palacio, mientras que en su período arcaico sufrió una destrucción total por parte de los persas. A pesar de ello, tras algunas excavaciones se han podido recuperar imágenes artísticas de la época. Por último, su etapa clásica se basó en la reconstrucción del lugar para darle la forma que conserva en la actualidad.

Teniendo en cuenta que este espacio representa un atractivo histórico a nivel internacional, en el siglo XX se han realizado numerosas restauraciones como fue el caso de la propuesta por Nikolaus Balanos en 1921 y en la cual se trabajó sobre columnas del Partenón hasta 1933.

Lo interesante de visitar la Acrópolis es hacerlo con un guía que te vaya contando la historia y el por qué de cada construcción. 

Visita la Acrópolis con un guía

Puedes visitar la Acrópolis con un guía experto en una excursión que incluye traslados y entrada al recinto. De esta forma ahorrarás colas y entenderás todos y cada uno de los secretos e historias de este fascinante e irrepetible lugar en el mundo. 

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