Casa de Jim Thompson

Jim Thompson fue un empresario y arquitecto estadounidense radicado en Tailandia. Coleccionista de arte y amante del Sudeste Asiático, Thompson llegó a formar una interesantísima colección de arte tailandés que hoy se expone en su casa-museo. El proyecto también incluye ejemplos de la arquitectura tradicional tailandesa hecha en madera de teca.

¿Quién fue Jim Thompson?

La historia de Jim Thompson es apasionante. Nació en 1906 en Estados Unidos. Durante la Segunda Guerra Mundial se convirtió en espía. Su rol en el ejército lo llevó a Asia, donde se enamoró de Tailandia. Gracias a su experiencia como parte de una familia de empresarios textiles, vio la posibilidad de revitalizar el negocio de la seda tailandesa. Muchos consideran que salvó a la industria de la extinción.

Sin embargo, a pesar de que sus hazañas a lo largo de la vida fueron siempre sorprendentes, tal vez lo que más llamó la atención sobre su persona fue que desapareció sin dejar rastro durante unas vacaciones en Malasia. Aunque las hipótesis fueron muchas, el misterio no pudo ser jamás desentrañado.

La Casa de Jim Thompson

Como coleccionista y arquitecto, el proyecto más importante de Thompson fue el complejo arquitectónico que se convertiría en su residencia y centro de exposición de su colección de arte. Las construcciones se realizaron en estilo tradicional tailandés usando madera de teca y partes originales de casas desmanteladas en distintos puntos de Tailandia. Algunas de las piezas tenían más de doscientos años en el momento de su adquisición y muchas fueron importadas desde Ayutthaya.

¿Qué esperar de la visita?

El museo está rodeado por un exuberante jardín tropical que es llamativo hallar en medio de Bangkok. Además de disfrutar la bellísima arquitectura de las casas del complejo, podrás ver bonitas tallas y piezas de porcelana, entre otros objetos de arte.

La visita es grupal y guiada (en inglés). Tiene una duración de 30 minutos aproximadamente. En el lugar hay una tienda de regalos con productos de la compañía de seda de Thompson y un bonito restaurante en el que vale la pena sentarse a comer o beber algo antes de la partida.