Campo del Moro

Origen del nombre

Estos jardines de Madrid recibieron este nombre porque en 1109 asentó allí su campamento el caudillo almorávide Ben-Alí. El nombre, no obstante, se le dio a partir del siglo XIX, tomando como referencia el ataque contra la ciudad que llevó a cabo este caudillo. Supuestamente, acampó con sus tropas en el mismo lugar donde en la actualidad se encuentra el jardín.

La belleza del lugar

Este conjunto ajardinado forma parte de los jardines del Palacio Real. Felipe IV se ocupó de embellecer el lugar construyendo fuentes y plantando árboles. El proyecto como tal fue iniciado en el siglo XIX por la Reina María Cristina: paulatinamente se creó un fabuloso jardín de estilo decimonónico que seguía la idea romántica de la naturaleza.

Durante la construcción los terrenos de Campo del Moro no pudieron ser ajardinados debido al desnivel que había desde el Palacio Real, el cual está ubicado a mucha altura. No obstante, con el tiempo, y después de un riguroso estudio, aprovecharon este desnivel para crear una de las perspectivas más bellas de Madrid: el Palacio Real se alza al final, detrás de un extenso tapiz de hierba natural con fuentes y monumentos.

Las dos fuentes neoclásicas más famosas del jardín del Campo del Moro son las de Los Tritones y Las Conchas, ambas labradas en mármol blanco y pobladas con personajes mitológicos.