¡Free tour! por Málaga imprescindible
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El teatro romano de Málaga es el yacimiento arqueológico de la ciudad mejor conservado. Se ubica justo en el centro de la ciudad, cerca de la Alcazaba, y como la gran mayoría de los teatros romanos, aprovecha inteligentemente la inclinación de la ladera del cerro para distribuir el graderío.
Cuando los romanos llegaron a Malaca (nombre que le dieron los fenicios), empezaron a construir edificios como por ejemplo las termas, pero tras la República, y con el nuevo sistema legislativo del Imperio Romano, la ciudad empezó a reflejar su monumentalidad construyendo edificios para dar una imagen grandilocuente a nivel político, económico y religioso. El objetivo era que la ciudad se convirtiese en un escenario de expresión ideológica para los grandes emperadores, de ahí que se levantaran edificios, como por ejemplo el gran teatro romano.
Este proceso de monumentalización se extendió hasta la primera mitad del siglo II, no obstante, un siglo después el teatro ya tendría un uso muy escaso y se abandonó completamente en el siglo III.
En los siglos V y VI se utilizó como cementerio, y cuando llegaron los árabes, lo utilizaron como recurso para conseguir piedra para la Alcazaba, de ahí que se encontrasen capiteles y figuras romanos en ella. Permaneció oculto durante muchos años, hasta que fue descubierto en 1951.
El teatro, por un lado, aprovecha la ladera del cerro y por otro crea una ladera artificial para apoyar las gradas. Sus características arquitectónicas son muy similares a las de otros teatros de Italia y de la Península Ibérica, como el de Tarifa o el de Sevilla, puesto que sigue los cánones arquitectónicos de Vitruvio.
La visita a las ruinas del Teatro Romano es perfecta para transportarse en el tiempo a la época de Augusto, cuando Málaga formaba parte del Imperio romano. En la actualidad, se conserva más de la mitad de su grada, y su orquesta mantiene el suelo con placas de mármol. Frente a ella, se conserva una magnífica inscripción. Por otro lado, su púlpito también se conserva en buenas condiciones, incluso se pueden apreciar rasgos de la pintura original.
Vale mucho la pena hacer la visita junto a un guía experto que pueda contarte las curiosidades históricas más llamativas del lugar y te muestre los detalles de interés de su diseño. Aquí te dejamos una visita guiada en la que verás también la Alcazaba. ¡El combo perfecto!
De martes a sábado de 10:00 a 18:00 h
Domingos y festivos: de 10:00 a 16:00 h
Gratuita
Calle Alcazabilla, S/N, Málaga