Puente de Alcántara

Sobre el río Tajo en la ciudad de Toledo se levanta uno de los puentes más bonitos de España: el Puente de Alcántara. Si echamos un vistazo a la panorámica general de Toledo, a los pies del majestuoso Alcázar de Toledo erguido sobre la colina, nos encontramos con la muralla toledana, y después, ya llegando al río, con este suntuoso puente romano.

La importancia de su construcción

El nacimiento de esta compleja obra arquitectónica se dio en el siglo III, y sobre él pasaba la calzada que unía Cesárea Augusta (la actual Zaragoza) con Emérita Augusta (la actual Mérida).

Las funciones comerciales del puente, junto a los vestigios arqueológicos y el circo romano de la antigua Toletum (Toledo), manifiestan la evidencia de que ya en época romana, esta ciudad era de grandes dimensiones, y que gozaba de gran importancia y reconocimiento.

Su nombre se debe a los árabes, quienes, tras su llegada a la Hispania, lo restauraron y le dieron el nombre de ‘al-qantarah’ (que significa ‘el puente’). Los árabes le dieron un uso aún mayor a este estratégico puente, puesto que también lo utilizaron para unir la ciudad de Córdoba con Zaragoza.

Frente al puente, encontramos la famosa Puerta de Alcántara, construida en el siglo X. Es también de estilo árabe, y da acceso al centro histórico de la ciudad.

La reconstrucción

Durante el reinado de Alfonso X, el Sabio, en el siglo X, el puente quedó muy destruido debido a una fuerte riada. A mediados del siglo XIII se reformó casi por completo. Se construyó entonces su famoso torreón occidental, que siempre sirvió como fortaleza y como lugar estratégico para cobrar el impuesto de ‘Portazgo’, del que estarían libres los toledanos y todos los vecinos que habitaran en los montes de los alrededores.

El torreón, situado en la parte oriental, sería sustituido en el año 1721 por un arco triunfal de estilo barroco, debido al estado de ruina en el que se encontraba.

Descubre los secretos de Toledo

En España, cada puente canta su propia canción, y el de Alcántara nos cuenta miles de historias, ocurridas a lo largo de cientos de años al servicio de los soldados, ciudadanos o peregrinos que lo cruzaban a diario. Algunas de estas historias nos cuentan chismes relacionados con la realeza, otras nos susurran secretos perturbadores e inquietantes.

Si quieres conocer todas las curiosidades y secretos de Toledo, no dudes en contratar la visita guiada nocturna: recorrerás las callejuelas de Toledo de noche para conocerla desde una atmósfera distinta, pero también pasearás por sus oscuros pasadizos y mazmorras, lugares que parece que aún hoy en día griten su historia a los cuatro vientos. 

• Reservar visita guiada nocturna por los secretos de Toledo.