Excursión a Formentor y Puerto Pollensa, con barco y visita a mercadillos
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88,04 US$
Sóller es una localidad enclavada en un valle rodeado de montañas. Estuvo durante muchos años aislada del resto de Mallorca, y la única forma de llegar a Palma de Mallorca desde aquí, era en barco o siguiendo un peligroso y agotador camino de montaña.
Al estar aislada, el comercio marítimo de Sóller y de su puerto, que se ubica a pocos kilómetros del pueblo, fue muy importante ya en la antigüedad gracias a la exportación de productos a Francia y Barcelona principalmente.
Los principales productos que exportaban eran naranjas, limones, higos y aceitunas. No obstante, en 1865 hubo una plaga horrible que echó a perder gran parte de los árboles. La única salida de muchos de sus habitantes, fue emigrar a Francia o América.
El negocio de los cítricos se recuperó en el siglo XX, y fue entonces cuando muchos regresaron con riquezas, y edificaron grandes casas que recuerdan al art noveau francés o a las colonias del sur de América. La Gran Vía del pueblo es un claro ejemplo de este tipo de arquitectura.
En el año 1912 fue inaugurado el antiguo ferrocarril de madera que conectaba Sóller con Palma de Mallorca en un trayecto de 28 km que atraviesa paisajes increíbles y, a su vez, se ha convertido en la actualidad en una de las mejores actividades turísticas de la isla y a su vez en un medio de transporte.
Para visitar Sóller y su puerto, la mejor forma de hacerlo es contratando un tour. Te recogerán en un punto cercano y te llevarán con un guía en español profesional para conocer el Puerto de Sóller y además el pintoresco pueblo de Valldemossa.
Coche: Desde Palma de Mallorca son 26 minutos desde la Ma-11.