Playas de Barcelona

Barcelona es una ciudad sostenible, cosmopolita, multicultural, rodeada de montañas a un lado, y abierta al mar al otro. Aunque hasta finales del siglo XX las playas no eran cómodas, con el tiempo se empezaron a habilitar para convertirlas en lo que son ahora: un conjunto de magníficas playas donde acuden muchos locales y turistas a tomar el sol y a bañarse. 

¿Qué tener en cuenta? 

Es importante que tengas en cuenta que el tiempo en Barcelona es muy caluroso en julio y agosto, cuando las temperaturas pueden superar tranquilamente los 32 ºC. Si vas a ir durante estas fechas, lleva crema solar, agua y parasoles. Por otro lado, en los meses de verano es cuando más concurridas están las playas de Barcelona. 

Lo más interesante de las playas de Barcelona es que están muy cerca de la ciudad, de ahí que la combinación para acceder en transporte público sea fácil y cómoda. Además, tienen un sinfín de servicios y equipamientos que las convierten en un espacio ideal para pasar el día.

Las playas se extienden a lo largo de todo el litoral barcelonés, junto a un paseo marítimo muy bien habilitado para recorrelo en bicileta o patines, y van desde Llevant, donde es posible ir con perros, hasta Sant Sebastià. 

Deléitate con la magia del lugar 

A lo largo de todo el Paseo Marítimo, aparte de poder contemplar las playas, serás testigo de un sinfín de vistas preciosas, especialmente al atardecer. Las playas de Barcelona están llenas de vida social, de gente jugando a vóleibol, de artesanos, de chiringuitos con vistas al mar, de obras de arte, como por ejemplo castillos de arena gigantes, de músicos y parques donde podrás relajarte y/o practicar deporte. 

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