Galería Umberto I

La Galería Umberto I es sin duda la más famosa de Nápoles. Se trata de una galería comercial construida en 1890 con una arquitectura e historia fascinantes. Por su prestigio y belleza suele ser comparada con la famosísima galería Vittorio Emanuele II de Milán.

Historia de la Galería Umberto I

La galería surgió como respuesta a la necesidad de saneamiento de una zona densamente poblada y que presentaba problemas de salubridad. Para eliminar los problemas de los callejones que desembocaban en el Castel Nuovo desde via Toledo, se propuso construir una galería de cuatro brazos cubierta por una cúpula. Así nació en 1890 la galería Umberto I, construida en tres años.

Arquitectura de la Galería Umberto I

El edificio de la galería es verdaderamente imponente. Tiene un inmenso pórtico sostenido por columnas de travertino, algunas de las cuales están rematadas con esculturas dedicadas a las estaciones del año, al trabajo y a la ciencia. Son muchos los símbolos que recubren los techos, paredes y pisos de la galería, todos sumamente llamativos y bien logrados.

Pero más allá de los detalles escultóricos y de yesería, lo que más llama la atención de la formidable estructura es el majestuoso techo vidriado. Una estructura de hierro y vidrio de forma abovedada provoca asombro y admiración en todos los visitantes. Si bien te costará trabajo dejar de admirar el espléndido trabajo que se eleva sobre tu cabeza, te recomendamos echarle también una mirada al piso, decorado con espléndidos mosaicos de los signos zodiacales.

Justo enfrente de la galería se encuentra el Teatro San Carlos, que también tiene una arquitectura digna de ser admirada. No te lo pierdas cuando estés por allí.

Tiendas

En la galería encontrarás todo tipo de negocios desde ropa hasta joyas, pasando por heladerías y cafeterías de primer nivel. Entre las marcas internacionales destacan una tienda de Zara, una de Sephora y un Timberland.

Si quieres probar los sabores de la pastelería napolitana, no dejes de visitar Sfogliatella Mary, una pastelería única. Suele haber colas, pero la espera vale la pena.