Excursión a Capri y Anacapri con almuerzo
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tours en Nápoles desde
Sorrento se encuentra de paso entre Nápoles y la Costa Amalfitana, por lo que es un destino casi obligado para los viajeros que se aventuran hasta ella. Pero Sorrento es mucho más que un lugar de paso: es una de las localidades más bonitas de toda Campania. ¿Quieres descubrir por qué? ¡Te lo contamos!
El centro histórico de Sorrento es un pequeño laberinto de callejuelas adoquinadas custodiadas por edificios de piedra y antiguas galerías. En un paseo sin rumbo por las calles del centro verás elegantes palacetes y bonitas iglesias. Corso Italia es la calle principal, y allí te encontrarás con un sinfín de tiendas boutique, bares y restaurantes.
Via San Cesareo es una calle paralela a corso Italia donde encontrarás un universo de productos relacionados con el limón, la fruta estrella de Sorrento (¡y de todo el sur de Italia!). Desde jabones hasta limoncellos, pasando por cerámicas y bizcochos. Un buen lugar para conseguir recuerdos que llevar a casa.
Es el antiguo y pintoresco puerto de pescadores de la ciudad, que aún se encuentra en funcionamiento. Su encanto reside en las pequeñas barcas de colores, las casitas y una playa donde puedes tomar el sol. Además, hay varios restaurantes con vista al mar donde probar las especialidades sorrentinas.
El nuevo puerto de Sorrento se ubica en una cala muy atractiva. Es un moderno puerto deportivo que recibe los ferries que vienen desde Nápoles, la Costa Amalfitana y las islas del archipiélago napolitano. Puedes llegar hasta la marina por un camino que va desde Piazza Tasso. Desde la Villa Comunal también tienes la opción de un ascensor (1 € por trayecto). Hay varios restaurantes y también un espacio con tumbonas.
La catedral de Sorrento, el claustro de San Francisco, la basílica de San Antonio… Son muchos los edificios religiosos de Sorrento que tienen una arquitectura para enamorarse. Arma tu itinerario y descubre estos maravillosos lugares y su interesante historia.
Sorrento no es en verdad un destino famoso por sus playas. La costa de Sorrento está bordeada en su mayor parte por montañas y acantilados. Sin embargo, hay dos rincones a los que puedes acercarte para disfrutar de la arena y el mar, y ya hemos hablado de ellos. Se trata de la Marina Piccola y la Marina Grande. Además de ellos, tienes el Punto del Capo en el sur de Sorrento. Esta última es la playa más concurrida.
Es uno de los mejores miradores de Sorrento. Se encuentra a un tiro de piedra del centro histórico y ofrece alucinantes vistas panorámicas de la bahía de Nápoles. El parque en sí es un paseo repleto de flores y árboles frondosos, que invita al relax y la contemplación. Compra un helado siéntate en uno de sus bancos y disfruta un momento inolvidable.
Sorrento es un lugar tan bello que cualquier viajero se sentiría tentado de quedarse allí a pasar una temporada. Sin embargo, también es posible visitar lo mejor de la ciudad en una mañana o una tarde y aprovechar el tiempo restante del día para conocer otros destinos. Dos combinaciones especialmente prácticas y populares son:
Es una gran idea combinar la visita a Sorrento con la Costa Amalfitana. Podrás aprovechar el tiempo al máximo y conocer algunos de los mejores lugares del sur de Italia en un solo día. Te recomendamos especialmente esta excursión que incluye los traslados en la que tendrás tiempo libre en Sorrento para descubrir sus encantos por tu cuenta y después te llevará de la manera más cómoda a seguir sorprendiéndote con la belleza de Positano, Amalfi y Ravello.
También puedes optar por visitar Sorrento junto con Pompeya y ponerle un poco de sal a la visita arqueológica. Visitarás Pompeya durante la mañana junto a un guía experto que te lo explicará todo y después pondrás rumbo a Sorrento para deleitarte durante la tarde con sus paisajes de ensueño.
Tren: línea circumvesuviana. Precio: 2,4 €. Tiempo estimado: cerca de 30 minutos.