Ondarreta

Ubicada en la bahía de La Concha, Ondarreta es una de las playas más populares de San Sebastián. Tiene un espíritu más juvenil e informal que la elegante playa de La Concha, pero es tan masiva como ella. ¡Te la presentamos!

¿Cómo es la playa de Ondarreta?

Ondarreta es una playa de 600 m de largo con una media de 100 m de ancho. Al tener un ancho estable, independiente de la variación de las mareas, su superficie media es más grande que la de La Concha, que mide el doble de largo pero tiene un franja de arena muy angosta cuando crece la marea.

Es una playa bonita y de fácil acceso, con todos los servicios. Tiene duchas, vestuarios, baños públicos, toldos, un chiringuito y un restaurante donde podrás comer sin salir de la playa. Por la tranquilidad de sus aguas, las actividades que ofrece y su ubicación, al abrigo del Monte Igueldo y a los pies del Palacio Miramar, es perfecta para visitar en familia o con amigos. 

La playa está bordeada por el paseo de Ondarreta, que en algunos tramos se abre a la playa y en otros está festoneado por la famosa barandilla de La Concha, típica del Paseo de La Concha.

¿Qué hacer en la playa de Ondarreta?

Desde ya, disfrutar de la arena dorada, ya que es una playa muy ancha y no tan visitada como la de La Concha, así que tiene mucho espacio para relajarse al sol.

En segundo lugar, puedes darte un relajante baño en sus aguas tibias y llegar nadando hasta la isla de Santa Clara. Al regresar, si te gustan los deportes, puedes seguir en movimiento con un poco de volley-playa, pala, canoa o fútbol.

Y, si estás con niños, no querrán dejar de tirarse por el tobogán de su gabarrón.

A la hora de tomar un descanso de la arena puedes caminar por el paseo de Ondarreta hasta el Peine del Viento o adentrarte en el barrio antiguo, donde encontrarás decenas de restaurantes.

Jardines de Ondarreta

A lo largo de la playa de Ondarreta se sitúan los jardines de Ondarreta. Son un precioso conjunto de parterres geométricos dispuestos en torno a un paseo central con glorietas protegidas por setos vegetales. 

En los caminos hay varias fuentes y bancos en los que sentarse a disfrutar los arreglos vegetales, repletos de plantas florales, dracenas, palmeras y los típicos tamarindos.

En medio de la glorieta central se levanta un monumento a la reina María Cristina. Es una estatua de bronce que se eleva sobre un imponente pedestal de mármol blanco. Pero la estatua dedicada a la reina no es la única del paseo: junto a la playa se ubica la obra moderna Zeharki, del artista Juan Ramón Anda, que ganó el primer premio en la Bienal Internacional de Cultura de San Sebastián.