Excursión al Puente colgante de Capilano y Montaña Grouse
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Si por fin te has decidido a ir a Vancouver, te recomendamos que le eches un vistazo a este post donde te descubrimos todo lo que tienes que tener en cuenta para que tu viaje no resulte frustrante desde ningún punto de vista.
Debes saber que Vancouver es una de las ciudades menos frías de Canadá, aunque la lluvia y la humedad es bastante recurrente, de ahí que sea imprescindible que tengas en cuenta muchas cosas: desde la ropa que debes llevar, hasta las mejores fechas para viajar o cómo moverse por la ciudad. Pero esto no es lo único que debes saber, hay otros muchos temas que a simple vista pueden pasar desapercibidos, pero que en el día a día, pueden aparecer y hacer que pierdas dinero o tiempo. ¡Te lo explicamos todo!
Para poder entrar en Canadá necesitarás tener un pasaporte válido durante todo el viaje y un visado que especifique el motivo de tu viaje. No es difícil tramitar la visa online, es tan solo un trámite burocrático que deberás hacer antes de viajar para no tener problemas en las aduanas.
Para tramitar la visa online (o eTA) tienes que:
El eTA tiene una validez de hasta 5 años y solo se puede solicitar uno por persona. Asegúrate, antes de tramitarlo, que conoces las fechas del viaje, que tienes un correo electrónico activo y una cuenta bancaria válida.
La moneda oficial de Canadá son los dólares canadienses (CAD) y esta es la moneda que deberás utilizar dentro del país. Los turistas pueden cambiar su moneda en los propios bancos canadienses, casas de cambio, uniones de crédito o también en oficinas de cambio extranjeras.
No obstante, te recomendamos que llegues al país con la moneda ya adquirida. Muchos bancos de tu país podrán hacerte el cambio. También te recomendamos que utilices la tarjeta de crédito para pagar. En Vancouver aceptan el pago con tarjeta de crédito en casi todos los lugares, excepto en el pago de pequeñas sumas como el medio de transporte o las propinas. No tendrás problemas para pagar con tu tarjeta, pero no olvides habilitarla antes de salir del país.
Cuando llegues al Aeropuerto Internacional de Vancouver, probablemente después de un largo viaje, lo primero que te apetecerá es llegar cuanto antes al hotel para descansar y adaptarte a la ciudad. Llegar al centro de Vancouver es fácil si sabes cómo hacerlo:
La opción más barata es tomando un autobús desde la terminal de vuelos nacionales. Aquí podrás tomar la línea 424 que te lleva hasta la estación de autobuses del aeropuerto. Una vez llegues aquí, toma la línea 98-B para llegar al centro de la ciudad. Ten en cuenta que el billete original te servirá hasta 90 minutos después de adquirirlo.
Por otro lado, ten en cuenta que el precio en autobús desde el aeropuerto, al ser de dos zonas, es de 4,25 CAD. Un importe que deberás llevar exacto porque no admiten tarjetas de crédito. Asegúrate de pedirlo en el aeropuerto antes de llegar a la estación.
Otra opción es tomar el Canada Line. Es un servicio de tren de alta velocidad que conecta el centro de Vancouver con el aeropuerto y tarda tan solo 26 minutos. Tiene una frecuencia de 7-15 minutos, se encuentra en el nivel 3 de la Terminal Principal y su precio es de 4 CAD. Pero para salir del aeropuerto es necesario pagar una tarifa de 5 CAD, por lo que el billete finalmente costará 9 CAD.
Cómpralo desde las máquinas de la estación, las cuales aceptan monedas, billetes de hasta 20 CAD y tarjetas de crédito y débito.
Si llegas en grupo es probable que te interese la idea de llegar en taxi, cuyo viaje puede costar entre 30 y 40 CAD. Un precio que es relativamente económico si se divide entre todos los viajeros.
Si vas a viajar por los alrededores de Vancouver y tienes pensado hacerlo en coche. La mejor opción es que lo alquiles directamente dese el aeropuerto y así ya tienes la llegada resuelta. No olvides seleccionar este aeropuerto como lugar de recogida cuando hagas la reserva del coche online y que tampoco se te escape buscar alojamiento con parking incluido.
Es fácil moverse por Vancouver. La ciudad no es muy grande y está muy bien comunicada con varias redes de transporte público que no te resultará muy difícil de entender.
Los precios de los billetes son de (zona 1) 2.85 CAD, (zona 2) 4.10 CAD y (zona 3) 5.60 CAD, pero los fines de semana y cada día después de las 18:30 h, solo se paga el valor de la zona 1 por cualquier billete. Vancouver Downtown es la zona 1, mientras que Burnaby, New Westminster, Richmond y North Vancouver corresponde a la zona 2.
Para moverte por Vancouver puedes utilizar los siguientes medios de transporte:
Es un tren ligero con algunos tramos elevados que pasan por encima de las carreteras y a su vez es el medio de transporte más amigable con el medio ambiente por que no produce emisiones de C02.
En total hay dos líneas de SkyTrain, que son la ExpoLine y la Millennium. Cubren en total 33 estaciones y ambas llegan al centro de la ciudad. Si te alojas en las afueras de la ciudad, podrás llegar fácilmente al centro de la ciudad utilizando alguna de estas líneas.
Podrás comprar fácilmente los billetes en las máquinas de las estaciones, pagando con tarjeta de crédito o efectivo. Ten en cuenta que, si vas a utilizar el transporte en varias ocasiones, quizás te conviene comprar un pase diario o incluso un bono mensual.
El SeaBus se toma desde Waterfront y te lleva a North Vancouver. Si antes has comprado un billete para el SkyTrain, recuerda que tiene una validez de 90 minutos y puedes utilizar el SeaBus como transbordo.
Este medio de transporte es ideal para viajar en barco y obtener unas hermosas vistas de Vancouver, quizás ves también alguna foca por el camino. Hay salidas cada 15 minutos y el trayecto de punta a punta dura 12 minutos.
El autobús es también una buena manera de moverse por Vancouver, aunque es algo más complejo. En realidad, Vancouver es una ciudad pequeña y puedes moverte a pie, pero este medio de transporte es especialmente útil si tienes que ir a las afueras de la ciudad o si quieres explorar algún barrio de la periferia.
Ten en cuenta que para los autobuses no podrás pagar con tarjeta de crédito, por lo que deberás llevar efectivo en el momento de subir al vehículo para pagarle al conductor. Por otro lado, si quieres hacer transbordo después de utilizar el autobús, debes pedirle al conductor el billete de transbordo.
Le hemos dedicado un apartado exclusivo a las mejores zonas para hospedarse en Vancouver. A grandes rasgos, te recomendamos que optes por hospedarte en el centro de Vancouver para estar cerca de los atractivos turísticos, ya sea en el West End, en Gastown, Chinatown o Yaletwon.
Pero otras zonas cercanas y con buenas ofertas pueden ser, por ejemplo, Burnaby o Granville Island. Encontrarás buenas ofertas en ambos lugares, aunque después tendrás que depender del transporte público para llegar al centro y ver lugares como el Stanley Park, English Bay o irte de compras.
En Vancouver no te aburrirás. Hay muchísimas actividades culturales y lugares de interés que definen a esa ciudad sostenible y que integra tan bien modernidad con naturaleza. El Stanley Park, por ejemplo, es la joya de la corona, pero tampoco te puedes perder el Gastown, con su famoso reloj de vapor, o el barrio chino y sus restaurantes.
Vancouver tiene además museos interesantes y muy divertidos para toda la familia, como el Science World o la Galería de Arte Nacional. Echa un vistazo a nuestra lista de imprescindibles para saber qué atracciones turísticas no te puedes perder por nada del mundo.
Una de las mejores cosas que puedes hacer para disfrutar de la ciudad es contratar un tour con un guía local de habla hispana, para aprenderlo todo sobre la ciudad. Pero más allá de esto, podrás encontrar tours que te lleven a lugares de los alrededores de Vancouver que son una maravilla, como, por ejemplo:
Echa un vistazo completo a nuestras actividades para no perderte nada y vivir tu experiencia canadiense al 100%.
Una de las preguntas que más se hacen los viajeros cuando quieren ir a Vancouver es en qué época visitarla. Si bien, no hay una fecha en particular, todas las estaciones tienen su encanto, no obstante, entre los meses de marzo a mayo y de septiembre a noviembre es cuando la temperatura es más moderada. Además, durante estos meses se pueden encontrar buenas ofertas de alojamiento.
Los meses de verano hace calor, de junio a agosto, aunque durante estas fechas, hay muchas actividades y cosas que hacer. Además es cuando más puedes disfrutar de las playas y de las piscinas. Ten en cuenta que los precios se disparan por ser temporada alta y los alojamientos serán más caros, especialmente por el centro.
Pero si lo buscas es disfrutar de los deportes de invierno, la mejor época será de diciembre a marzo. Disfrutarás como un loco de las pistas de esquí de Grouse Mountain o Whistler y de los paisajes nevados en las montañas.
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