Plaza de la Ciudad Pequeña

La Plaza de la Ciudad Pequeña de Praga se encuentra en el centro de Mala Strana. Es el corazón del Barrio Pequeño y una de las zonas más animadas de la ciudad. Allí siempre encontrarás movimiento de gente, ya que tanto viajeros como locales la habitan noche y día.

Una plaza con encanto

Esta plaza fue construida en la Edad Media, y allí funcionaba un gran mercado. Ha sido el corazón de Mala Strana desde entonces. A su alrededor verás una multitud de edificios de la misma época, algunos reconstruidos o modificados durante el barroco y el renacimiento. En la plaza podrás diferenciar una parte alta y una parte baja, ya que las construcciones han seguido el desnivel que el terreno tiene naturalmente debido a la ladera de la Colina de Petrin.

Es una zona muy concurrida día y noche, por la multitud de tiendas, restaurantes y bares instalados allí. Sin duda, merece la pena pasearse para ver las casas de estilo barroco que rodean la iglesia, y ser partícipe del bullicio y el espíritu tan pintoresco que define la personalidad de este lugar.

¿Qué ver en la Plaza de la Ciudad Pequeña?

La Iglesia de San Nicolás es el edificio emblema de la Ciudad Pequeña y para muchos la construcción barroca más bonita de toda Praga. Tiene un interior espléndido, decorado con frescos y esculturas del piso al techo. Una de las mejores formas de disfrutarla es subiendo a su torre. Desde su punto más alto, a 65 metros sobre la ciudad, tendrás unas espectaculares vistas de la ciudad, con Malá Strana en primer plano.

Además de la Iglesia de San Nicolás, hay una llamativa columna en el centro de la plaza e importantes edificios históricos a su alrededor:

• Columna de la Santísima Trinidad o Columna de la Peste, levantada en 1713 para agradecer por el fin de la enfermedad. Está decorada con imágenes de santos, ángeles, el Ojo Divino y una paloma. Para muchos, es la columna barroca más bella de Praga.
   
• Palacio Sternberg. Tiene también un maravilloso estilo barroco. Lo más destacado son las arcadas que decoran la parte inferior del palacio y una pintura de la coronación de la virgen María.
  
• Palacio Kaiserstein, construido en 1714 y reconstruido en 1896. El interior conserva muy bonitos frescos y esculturas.
  
• Palacio Liechtenstein, fue la primera residencia de la familia Liechtenstein en Praga. Hoy es un lugar maravilloso para escuchar un concierto de música checa.

Visitar la Plaza de la Ciudad Pequeña

Para descubrir los secretos de este rincón emblemático de Praga, resulta muy práctico recorrerla junto a un guía experto. Así podrás enterarte de las curiosidades y anécdotas que la vuelven realmente única. Puedes apuntarte, por ejemplo, a este tour de Praga al completo que la incluye en su itinerario, junto con otros clásicos como la plaza de la Ciudad Vieja o el Castillo. ¡No te lo pierdas!

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