Barrio de San Miguel

Muy cerca de la Catedral y la Plaza Mayor se extiende un barrio repleto de escalinatas, pequeñas plazas y antiguos edificios que enamora a todo aquel que lo visita. Es el barrio de San Miguel de Cuenca. ¡Ven a conocerlo!

Un barrio con encanto

Para empezar, debes saber que el barrio de San Miguel de Cuenca se encuentra en pleno casco antiguo. Para acceder a él desde la parte alta puedes cruzar el arco ojival de la Anteplaza, justo al lado de la oficina de Turismo de Cuenca, o atravesar los túneles de la calle Severo Catalina. Si estás en la parte baja de la ciudad, tienes que ir por el Recreo Peral, un hermoso paseo de madera rodeado de pura naturaleza.

Una vez que hayas cruzado alguno de esos portales mágicos te encontrarás en un laberinto de callejas, escaleras y miradores que te invitarán a moverte, cámara en mano, a paso lento.

Qué ver y hacer en el barrio de San Miguel

Lo primero que te recomendamos hacer es perderte por las callejuelas del barrio mientras admiras la arquitectura medieval, los escudos labrados en piedra, la antigua fuente e, incluso, algunos rascacielos (¡sí, los rascacielos del barrio San Martín no son los únicos de la ciudad!). Si quieres tener un itinerario más definido, aquí te dejamos algunos imprescindibles del barrio que puedes buscar durante tu recorrido:

• Iglesia de San Miguel. Es uno de los edificios más destacados del barrio y está entre las parroquias más antiguas de Cuenca. Fue construida a fines del siglo XIII y formaba parte de la muralla defensiva de la ciudad. Hoy se encuentra desacralizada y suele albergar conciertos y otros eventos culturales. Vale la pena visitarla tanto de día como de noche, cuando la iluminación le da un encanto especial.
   
• Miradores de San Miguel. Hay varios miradores muy bonitos en el barrio. Junto a la iglesia hay unos que ofrecen vistas maravillosas de la hoz del Júcar. Y justo frente al arco ojival de la Anteplaza por el que se ingresa al barrio hay otro mirador, que da a la parte baja de la ciudad, y tiene al antiguo hospital de Santiago como protagonista. Como curiosidad, tal vez te interese saber que las barandillas de este mirador eran las balaustradas de la antigua fachada de la Catedral.
   
• Bares y pubs. Al caer la noche la vida se enciende en los muchos bares y pubs del barrio, sobre todo en verano. En esta época no es extraño que haya música en vivo en las terrazas.